sábado, 31 de mayo de 2014

MIELOMA MÚLTIPLE


El mieloma múltiple pertenece a un determinado grupo de cánceres que se conoce como linfoma no Hodgkin maligno o de alto grado. Por definición, todos los linfomas malignos que se originan en el tejido linfático y que no son el linfoma Hodgkin se denominan linfoma no Hodgkin. Es una neoplasia de células plasmáticas caracterizada por afectación del esqueleto en múltiples lugares. Se debe a la proliferación de un clon de células B que sintetizan y segregan una sola inmunoglobulina homogénea o sus fragmentos.
Aunque predomina la enfermedad ósea, el proceso también se puede extender a los ganglios linfáticos y a otros tejidos, como la piel. Su incidencia es mayor en hombre, personas de origen africano y ancianos.

ETIOLOGIA
 La proliferación y supervivencia de las células del mieloma múltiple depende de varias citosinas, sobre todo de IL6. Esta es producida por las células plasmáticas neoplásicas y las células estromales normales de la medula ósea. Los niveles séricos de esa citosina están aumentados en pacientes con la enfermedad.
Los factores producidos por las células plasmáticas neoplásicas median la destrucción ósea. Una variedad de citosinas producidas por las células tumorales, en particular MIP1a Y RANKL, actúan como factores activadores de los osteoclastos.
 
SÍNTOMAS
  • Dolores óseos o fracturas.
  • Alteraciones bioquímicas de la sangre y de la orina.
  • Anemia (cansancio, palidez, taquicardia, sofocos, etc.)
  • Reiteradas infecciones.
  • Hipercalcemia.
  • Aumento de proteínas en sangre y orina.
MORFOLOGIA

Se presentan la mayoría de veces como tumores óseos destructores multifocales, compuestos de células plasmáticas y distribuidos por todo el sistema esquelético. Los huesos del esqueleto axial son los mas afectados frecuentemente. Estas lesiones focales comienzan de modo habitual en la cavidad medular, erosionan el hueso trabecular y destruyen progresivamente la corteza, lo que conduce con frecuencia a fracturas patológicas. Las lesiones óseas aparecen en las radiografías como defectos en sacabocados.

El examen microscópico de la medula revela un numero aumentado de las células plasmáticas, que pueden infiltrar la medula o presentarse como masas que sustituyen por completo a los elementos normales.
Las células neoplásicas suelen tener una zona clara perinuclear y un núcleo en posición excéntrica. Pueden predominar las células plasmáticas con aspecto normal o las células multinucleadas intensamente atípicas. Otras variantes citológicas proceden de la síntesis y secreción desregulada de inmunoglobulinas, que a veces conducen a la acumulación de Ig intacta o parcialmente degradada. 


BIBLIOGRAFIA

http://www.mieloma.org.ar/

Robbins y Cotran. Patología estructural y funcional. Editorial Elsevier. 2010.


 

domingo, 25 de mayo de 2014

MELANOMA MALIGNO ORIENTADO AL MELANOMA DE PIEL

El melanoma es una neoplasia relativamente frecuente, se trata de un tumor generalmente cutáneo, pero también del intestino, mucosas de la boca, de la región anogenital, esófago, meninges y del ojo. Es altamente invasivo por su capacidad de generar metástasis. Al igual que en las neoplasias epiteliales malignas de la piel, parece que la luz solar desempeña un papel importante en el desarrollo del melanoma cutáneo maligno. La mayoría son curados quirúrgicamente. Los individuos de pigmentación clara tienen un mayor riesgo de desarrollo de melanoma que los de pigmentación oscura, sobre todo si habitan regiones con climas soleados. Es más frecuente en la espalda de los hombres y en las piernas de las mujeres.

SIGNOS CLINICOS DEL MALANOMA DE PIEL

El melanoma maligno es generalmente asintomático. El signo mas importante es el cambio de color, tamaño y forma. Es de gran utilidad seguir la regla que se encuentra a continuación en la figura. (REGLA ABCDE)
 
 
  • Son asimétricos.
  • Los bordes no son lisos, redondeados y uniformes. Son irregulares y con frecuencia "con muescas".
  • Exhiben variaciones en la pigmentación con tonos de negro, marrón, rojo, azul oscuro y gris. Aunque a veces hay zonas de hipopigmentacion de color blanco o carne.
  • Tienen un diámetro mayor de 10 mm.
  • Desarrollo de una nueva lesión pigmentada durante la vida adulta.
CRECIMIENTO

El crecimiento radial indica la tendencia de un melanoma a crecer horizontalmente en las capas epidérmica y dérmica superficiales, con frecuencia durante un periodo prolongado de tiempo. Durante este estadio las células del melanoma no tienen la capacidad de metastatizar.
Con el tiempo, el patrón de crecimiento adquiere un componente vertical y el melanoma crece ahora hacia abajo, hacia las capas dérmicas mas profundas como una masa que se expande y que carece de maduración celular. Esta etapa se correlaciona con la aparición de un clon de células con verdadero potencial metastásico.
 
PATOLOGIA
 
La radiación causa daño en el ADN de las células, típicamente una dimerización de la timina que, al no ser reparado por la maquinaria intracelular, crea mutación en los genes celulares.
Las células individuales del melanoma suelen ser considerablemente mayores que las células nevicas (células de lunar). Contienen grandes núcleos con contornos irregulares, y es característico que la cromatina se encuentre aglutinada en la periferia de la membrana nuclear. Estas células proliferan como nidos mal formados o como células individuales en todos los niveles de la epidermis en la fase de crecimiento radial, y en la dermis como nódulos que se expanden en forma de nidos en la fase de crecimiento vertical.
 
 Crecimiento radial de melanoma maligno.

     Crecimiento vertical de melanoma maligno, que muestra agregados nodulares de células intiltrantes.
 
BIBLIOGRAFIA
 
Robbins y Cotran. Patología estructural y funcional. Editorial Elsevier. 2010.
 



domingo, 11 de mayo de 2014

ETIOLOGIA Y PATOLOGIA DE LA TUBERCULOSIS


La tuberculosis (TB) es una infección bacteriana causada por un germen llamado Mycobacterium tuberculosis. La TB se disemina a través del aire, cuando una persona con TB tose, estornuda o habla. Aunque la tuberculosis es una enfermedad predominantemente de los pulmones, puede afectar también el sistema nervioso central, el sistema linfático, el sistema circulatorio, el sistema genitourinario, el aparato digestivo, los huesos, las articulaciones e incluso la piel. La tuberculosis florece dondequiera que exista pobreza, hacinamiento y enfermedad debilitante crónica. Ciertos estados patológicos también incrementan el riesgo: diabetes mellitus, linfoma de Hodgkin, enfermedad pulmonar crónica (particularmente silicosis), insuficiencia renal crónica, malnutrición, alcoholismo e inmunosupresión.
Es importante diferenciar la infección de la enfermedad por M. tuberculosis. La infección es la presencia de organismos que pueden o no causar enfermedad clínicamente significativa. La mayor parte de infecciones se adquieren por transmisión de persona a persona de los organismos transportados por el aire desde un caso activo hasta un anfitrión susceptible. En la mayoría de las personas la tuberculosis primaria es asintomática, aunque puede causar fiebre  y derrame pleural. Los organismos viables pueden permanecer inactivos en estas lesiones durante décadas. Si las defensas inmunitarias están bajas, la infección puede reactivarse para producir enfermedad contagiosa y potencialmente muy grave.

ETIOLOGIA

El contagio de tuberculosis ocurre cuando la persona sana inhala microscópicas gotas de saliva procedentes del enfermo (llamadas aerosoles), que se generan cuando este tose o estornuda. Estas gotas con bacterias tienen un tamaño muy pequeño y llegan a zonas profundas del pulmón de la persona sana, donde podrían proliferar dando lugar a la enfermedad.
 
En los lugares cerrados, mal ventilados, estas gotas pueden acumularse en el ambiente, alcanzando una gran concentración y facilitando así la inhalación de las mismas. Es por este motivo que en las regiones o zonas en las que se vive en condiciones de pobreza o hacinamiento es más plausible el contagio de tuberculosis. Aunque hay factores que determinan la probabilidad del contagio, como las horas compartidas con el paciente en espacios cerrados, la virulencia de la bacteria (Mycobacterium tuberculosis), o la propia susceptibilidad de la persona sana, se acepta que contraer la enfermedad no es fácil, y que hace falta un contacto prolongado para que exista un riesgo real de contagio (de manera orientativa, se suelen determinar unas seis horas).
PATOGENIA
La patogenia de la tuberculosis en una persona inmunocompetente no expuesta previamente depende del desarrollo de inmunidad antimicobacteriana mediada por células, que confiere resistencia a las bacterias y también da lugar al desarrollo de hipersensibilidad frente a los antígenos micobacterianos. Las manifestaciones patológicas de la tuberculosis, como granulomas caseificantes y cavitación, son consecuencia de la hipersensibilidad que se desarrolla juntamente con la respuesta inmunitaria protectora del anfitrión. Los macrófagos son las principales células infectadas por M. tuberculosis. Precozmente en la infección, los bacilos tuberculosos se replican esencialmente sin control, mientras que más tarde durante la infección la respuesta celular estimula a los macrófagos a contener la proliferación de las bacterias.                                                                                                 M. tuberculosis entra en los macrófagos por endocitosis mediada por varios receptores del macrófago, bloquea la formación del fagolisosoma mediante inhibición de las señales del Ca 2+ y el reclutamiento y ensamblaje de las proteínas que median la fusión fagosoma-lisosoma. Por tanto, durante el estadio más precoz de la tuberculosis primaria (menos de 3 semanas) en el individuo no sensibilizado, las bacterias proliferan en los macrófagos y espacios aéreos alveolares, dando lugar a bacteriemia y siembra en múltiples localizaciones.
 
 
Aproximadamente 3 semanas después de la infección se organiza una respuesta de linfocitos T-cooperadores 1 (TH 1) que activa los macrófagos para que se hagan bactericidas. La diferenciación de los linfocitos TH 1 depende de la IL-12 que es producida por las células presentadoras de antígeno que se han encontrado con las micobacterias.
Las células TH 1 maduras producen IFN- GAMMA, es el mediador crítico que permite a los macrófagos contener la infección por M. tuberculosis. El IFN estimula la formación del fagolisosoma en los macrófagos infectados, exponiendo las bacterias a un entorno ácido inhóspito.
El IFN- GAMMA  también estimula la expresión de óxido nítrico sintasa inducible, que produce óxido nítrico capaz de destruir varios constituyentes micobacterianos, desde la pared celular hasta el ADN.
Además de estimular los macrófagos para matar las micobacterias, la respuesta TH 1 estimula la formación de granulomas y necrosis caseosa. Los macrófagos activados por IFN-GAMMA se diferencian a «histiocitos epitelioides» que caracterizan la respuesta granulomatosa, y pueden fusionarse para formar células gigantes.
 
 
En muchas personas esta respuesta detiene la infección antes de una destrucción tisular o enfermedad significativas. En otras personas la infección progresa debido a edad avanzada o inmunosupresión, y la respuesta inmunitaria en marcha da lugar a destrucción tisular debida a caseificación y cavitación. Los macrófagos activados también segregan TNF que promueve el reclutamiento de más monocitos. En resumen, la inmunidad a M. tuberculosis está mediada principalmente por los linfocitos TH 1 que estimulan a los macrófagos para que maten las bacterias.
La tuberculosis secundaria es el patrón de enfermedad que se observa en un anfitrión previamente sensibilizado. Puede aparecer poco después a la tuberculosis primaria, pero lo suele hacer muchos años después de la infección inicial, generalmente cuando se debilita la resistencia del anfitrión. Con más frecuencia deriva de la reactivación de una infección latente, pero también guarda relación con reinfección exógena en el seno de deterioro de la inmunidad del anfitrión o cuando un gran inóculo de bacilos virulentos supera al sistema inmunitario del anfitrión. La reactivación es más frecuente en áreas de baja prevalencia, mientras que la reinfección tiene un importante papel en regiones de contagio elevado.
 
 
BIBLIOGRAFIA
Robbins y Cotran. Patología estructural y funcional. Editorial Elsevier. 2010.
Guía para el equipo de salud Nro. 3. Ministerio de Salud de la Nación. Mayo 2009.
 
 
 
 
 
 
 
 

 
 
 
 
 
 


domingo, 4 de mayo de 2014

Cuadro histopatologico de apendicitis aguda


El apéndice vermiforme es un divertículo verdadero normal del ciego que es propenso a la inflamación aguda y crónica. La apendicitis aguda es más frecuente en adolescentes y adultos jóvenes, pero puede presentarse en cualquier grupo de edad. Es un cuadro de abdomen agudo; cuando se habla de abdomen agudo, se refiere a cualquier afección aguda intraabdominal que necesita tratamiento quirúrgico urgente.
 


Causas o etiología:


ü  El 65% de los casos se debe a hipertrofia linfoide.

ü  El 35% a un fecalito o fecaloma. (figura2)

FIGURA 2 fecalito o fecaloma en apéndice ya extraída por apendicetomía.
 
 
ü  El 4% a un cuerpo extraño.
 
ü  Por ultimo, 1% es debido a tumores. (Figura 3)
 
FIGURA 3 Apéndice cecal: oclusión fibrosa de la luz y tumor distal.
 
 
Síntomas: Dolor primero en el epigastrio, luego en la fosa iliaca derecha; anorexia; náuseas y vómitos.
Signos: Fiebre, taquicardia y defensa (voluntaria e involuntaria).
 
La apendicitis aguda parece iniciarse por el incremento progresivo de la presión intraluminal que compromete el retorno venoso y linfático. La lesión isquémica y el estasis del contenido luminal, que favorecen la proliferación bacteriana, desencadenan las respuestas inflamatorias como el edema tisular y el infiltrado de neutrófilos en la luz, la pared muscular y las partes blandas periapendiculares.
 
histología:
Histológicamente el apéndice tiene 4 capas:
1.MUCOSA 
2.SUBMUCOSA
3.MUSCULAR 
4.SEROSA 

MUCOSA: Está formada por epitelio cilíndrico simple con cilios (chapa estriada) con células caliciformes.
El corion o lámina propia está formada por tejido conectivo laxo con la característica de infiltración de tejido linfoide.
La muscularis mucosae se ve deformada (interrumpida) por los folículos linfoides, encontrados en mucosa y submucosa.

SUBMUCOSA: Constituida principalmente por la presencia de folículos linfoides, tejido adiposo  además de la presencia de gruesos vasos arteriovenosos  conductos linfáticos y filetes nerviosos.

MUSCULAR: Posee 2 capas una circular interna y una externa longitudinal.

SEROSA: Formada por tejido conectivo con un mesotelio que recubre.
 
 
histopatología
En las primeras etapas iniciales de la apendicitis aguda los vasos subserosos están congestionados y existe un modesto infiltrado perivascular de neutrófilos dentro de todas las capas de la pared. La reacción inflamatoria transforma la serosa brillante normal en una superficie mate, granular y eritematosa. El diagnostico de apendicitis aguda requiere la presencia de infiltrado de neutrófilos en la muscular propia.
 
 

 
 
·         En los casos más graves en exudado prominente de neutrófilos genera una reacción fibrinopurulenta serosa. A medida que continúa el proceso se pueden formar abscesos focales dentro de la pared. (APENDICITIS SUPURADA AGUDA).
·         Si progresa el compromiso apendicular se producen áreas extensas de ulceración hemorrágica y necrosis gangrenosa que se extiende hasta la serosa. Se forma el plaston que es la adherencia del apéndice, el intestino delgado y el epiplón. (APENDICITIS GANGRENOSA AGUDA).
·         RUPTURA: A menudo la apendicitis aguda continúa con peritonitis supurada.
 
 
Bibliografía:
 
Robbins y Cotran. Patología estructural y funcional. Editorial Elsevier. 2010.
 
Ross- Pawlina. Histolohia. Editorial Panamericana. 2008.
 
      Histopatología de las apendicitis agudas.
      Dimas Denis Contreras Villa, Esteban Mosquera Morales, Zoila Castañeda Murcia.
      Morfolia Vol. 3 – No. 4 Año 2011.